Cuando salta una noticia en F1 suele desencadenar una ola detrás de ella. Vettel, el jueves, un día antes de que los monoplazas rodarán en el trazado del Hungaroring anunciaba que abandonaría la competición al acabar la presente temporada. Nadie sin tenerlo en cuenta se podía imaginar que detrás de esa decisión había otra que se estaba generando y que era una consecuencia: la firma de Fernando Alonso por Aston Martin. Un fichaje que se gestionó, como bien indicó el asturiano aunque todos pensaban que se refería a una más que avanzada renovación con Alpine, en 10 minutos.
Vettel abrió el camino de Alonso
El alemán se marchaba por desavenencias con la cúpula de Aston Martin, porque no veía al equipo capaz de ganar a corto plazo y porque meditó que lo más importante para él en estos momentos es pasar más tiempo con la familia. Mientras, en Alpine estaban relajados. Su director de equipo, Otmar Szafnauer, admitía que iba a ser un proceso muy sencillo y era sólo una cuestión de detalles. Quedaban por perfilar dos flecos en los que había un desacuerdo entre ambas partes: el dinero y los años de contrato. Fernando pedía un salario acorde a su importancia, su pilotaje y su trabajo. La marca francesa ofrecía menos, pero sobre todo el asturiano quería un contrato más largo y sólo le daban hasta 2023. “La razón sí es esa, ellos (los pilotos) quieren más dinero y nosotros queremos pagar menos. Y luego terminamos en una especie de lugar infeliz para todos, o un lugar feliz que todos están dispuestos a firmar”, señalaba el director de Alpine.
Sin embargo, Alonso se movería internamente con su equipo para analizar otras propuestas que le convencieron más. Alpine dejaría de ser una opción, la renovación se aparcaba a un lado, ya estaba decidido escuchar a Aston Martin que empezó a correr para proponerle un paquete que el español no pudiera rechazar. Las negociaciones fueron en secreto en un fin de semana de intenso esfuerzo tanto de Alonso como de Aston Martin para mantener el acuerdo en secreto, finalmente se anunció su fichaje al público el lunes por la mañana.
Lawrence Stroll, propietario de la marca, y personal del equipo habían estado trabajando duro durante varios días para crear un paquete que fuera lo suficientemente bueno como para convencer a Alonso de comprometerse ya, sin necesidad de alargar las cosas hasta el verano. Aston Martin siempre estuvo dispuesto a mantener a Vettel en su estructura y le pidió que tomara la decisión que eligiese sería bueno que lo dijera antes del verano, y así fue.
El cuatro veces campeón del mundo informó que dejaría la F1 y en ese momento empezaron a intensificarse las negociaciones entre el padre de Stroll y Alonso, conversaciones que ya venían de tiempo atrás. Quedaba un asiento libre, había muchos aspirantes, pero la idea era colocar a un campeón del mundo y Alonso era uno de ellos. El jueves le preguntaron si Aston Martin era una opción: “Todos los equipos son una opción, siempre que no tengan dos pilotos fichados», explicó el asturiano, que nunca cerró la puerta a los ingleses. La posibilidad de un cambio se convirtió en una opción genuina y se movió muy rápido.
Reforzarse para conseguir éxitos
Las ambiciones de ambos son las de ganar, construir una marca que luche por victorias y había una pequeña ventana de oportunidad. Y al final, el reto que le ha puesto encima de la mesa Aston Martin le ha convencido. Una buena gesta de dinero tanto de Stroll padre como de personas de arabia, cuenta con nuevos patrocinadores, más socios tecnológicos, una nueva sede cerca de Silverstone que se encuentra en construcción, un nuevo túnel de viento, dos jefes aerodinámicos de Red bull y Mercedes que recalarán en el equipo y la ganas competitivas de ganar Aston Martin y Alonso en la pista.
El famoso «plan» cambia del azul al verde, como verde son las sensaciones en el equipo esta temporada, pero son las ambiciones fuertes las que probablemente han provocado cambiar las cosas para que Alonso finalmente se comprometiera.
El tiempo dirá si es o no una buena elección. Abandona el cuarto equipo de la parrilla y se meterá en el garaje del noveno. También el reloj va en contra de Alonso que tiene 41 años y su vida en la F1 se acorta cada vez más. De momento ha firmado un contrato para un año, pero puede renovarse porque es multianual. Todo dependerá de cómo vaya el proyecto. No existe bola de cristal que adivine si saldrá bien o mal, pero cada vez que ha salido de Renault, ahora Alpine, siempre ha ido a un equipo competitivo: McLaren 2007 y Ferrari 2010.
Hay tres equipos que van uno o dos pasos por delante del resto que son Red Bull, Ferrari y Mercedes y la parte media está muy igualada. «Hay que confiar en algunos de los proyectos, que tal vez deseen ser más competitivos el próximo año. Eso es todo lo que espero», ha expresado Alonso en un comunicado tras su fichaje.
En Aston Martin tienen la maquinaria y ahora se les suma el mejor espadachín, sólo falta que por fin una marca le de la espada que le permita luchar por lo que merece.
- Tomado de: https://www.caranddriver.com/es/formula-1/a40771605/aston-martin-gestiono-fichaje-alonso/